CAMPIONAT DE CATALUNYA DE 10MIL EN PISTA.
Ayer se disputó en Manresa el Campeonato de Catalunya de 10mil metros en pista, donde tomaron parte todas las categorias desde juniors hasta Veteranos. Este año he hecho un poco de todo: ruta, cross, montaña, canicross, 30km y , antes de hacer una maratón, también he querido probar la pista. El resultado para mí era un poco lo de menos, no lo había preparado demasiado. La verdad es que hace bastantes semanas que no hago nada de series y mis rodajes no son muy intensos. Sin embargo, mi pretensión era otra, buscaba sensaciones, la sensación de volver a la pista, el terreno por el que desarrollé gran parte de mi carrera deportiva... volvía a la que había sido mi casa.
Al entrar en el estadi del Congost, en Manresa, y sentir el olor a tartán me vinieron a la mente montones de recuerdos, buenos y malos momentos vividos por todo el mundo en ese óvalo de 400metros. El crono, el contador de vueltas, la campana... ese sonido mágico que te indica que sólo te queda una vuelta. Qué de momentos vividos, cuantos cambios de ritmo he tenido que dar para ganar una carrera o conseguir una marca tras oír ese repicar metálico.
En la carrera sufrí un poco, era de esperar, no estoy para ritmos rápidos. Sufrí desde el 4º kilómetro, pero allí estaba Antonio Hernández Luna , mi eterno entrenador, que en la contra-recta me animaba y me controlaba los parciales, como en los viejos tiempos. Reconozco que pensé en retirarme cuando aún me restaban 15 vueltas, tenía flato y se me estaba haciendo muy cuesta arriba. Hacía bastante viento en la recta y me veía con poca fuerza. Pero Antonio me recordó que iba en posición de podium y que luchara por mantenerme ahí. Lo hice, me mantuve en carrera y busqué mantener el puesto e intentar al menos bajar de 33 minutos. Una vez asegurado el sub-campeonato en la categoría de mayores de 35, esprinté en los últimos metros en mi particular lucha contra el crono, al final no pude con él, por los pelos, ¡33'00"02!
Lo importante de esta competición ha sido ese reencuentro con mi pasado. Aunque reconozco que, a veces, me gustaría ponerme a entrenar duro otra vez para recobrar esas sensaciones tan agradables de correr rápido. Pero entonces pienso, también, que todo lo que tenía que hacer ya lo hice en su momento... o al menos lo intenté.
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